miércoles, 28 de octubre de 2009

LA DEMANDA DE LA ESTÈTICA

Ensayo 5


Nuevo régimen del arte en el que la estética remplaza al arte, en el que la experiencia del arte toma paso sobre los objetos y las obras, en el los procedimientos y la posturas remplazan las propiedades, en el que las transacciones y las relaciones son la substancia


A grandes intervalos en la historia se transforma al mismo tiempo que el modo de existencia el modo de percepción de las sociedades humanas una manifestación mas de la conducta estética del animal humano.

La experiencia estética trae pacer y satisfacción sensible el placer no es intelectualizado generado por la contemplación de la armonía no es el sentido de lo sublime inspirado por la belleza .

La experiencia del arte alcanza de hecho la felicidad tal y como viene descrita alabada y prometida por la publicidad garantizada sin sombras ni catástrofes por los contratos de seguros hecha fácil y protegida hasta la despreocupación por tecnologías afamadas perfectamente fiables

Cuando lo nuevo se vuelve tradición y hasta rutina la dimensión utópica es lo que desaparece solo queda el movimiento de la renovación al ritmo de la vida de los medios de de información y de la industria de la diversión algo tiene que suceder continuamente no importa mucho lo que realmente ocurra , lo importante es que ocurra que haya nuevos artistas y nuevas exposiciones manifestaciones que se abran , temas inéditos que parezcan

En el régimen de la estética lo que importa no es el contenido de la experiencia tampoco su forma ni los medios que utiliza sino la experiencia misma como serie conjunto o familia de experiencias discontinuas de carácter esa es la razón por la que todos los contenidos son igualmente aceptables para el público el mercado y el medio

El artista puede elegir cualquier tema cualquier medio todo puede funcionar según sus modos de operación de ahí también el desarrollo de los sistemas de producción se necesita arte para embellecer la vida cotidiana por medio de pequeños toques estéticos que cambien todo con casi nada

El arte ya no es una manifestación del espíritu sino algo como el ornamento o el adorno especifico de la época la obra autónoma y orgánica que tiene vida propia, del estilo al ornamento y del ornamento al adorno especifico

El arte se refugia entonces n una experiencia donde los objetos ya no están rodeados de un aura que ya no se relaciona con casi nada identifica la época por medio de la moda.

domingo, 11 de octubre de 2009

HACIA EL TRIUNFO DE LA ESTÈTICA

Ensayo 4


Estética: el arte y su experiencia
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La historia de la estética filosófica muestra que sus problemáticas , sus formulaciones y sus doctrinas , están en cada caso, relacionados con un estado del arte y un tipo de objeto artístico que a su vez es posible por el conocimiento que se formula sobre el y que hace posible este conocimiento

La dialéctica de la presuposición de Hegel presupone un objeto y lo pone y al mismo tiempo se pone por si misma y así se justifica.

La naturaleza de la obra de arte (de la que trata la ontología del arte ) de su funcionamiento explicado por los mecanismos de la simbolización de la naturaleza del sentimiento estético dado por la experiencia y la actitud estética

De los mecanismos de la creación y del sistema de las artes estructurada alrededor de un museo regulado por la existencia de un canon estético las grandes obras y de un sistema de las bellas artes que gobierna la delimitación del arte en relación unas con otras

Surgió entonces el diagnostico del advenimiento de una nueva forma de experiencia y una tentativa de reformulación de la estética clásica para poder tomar en cuenta el arte moderno.

Otra perspectiva consiste en volver a los conceptos de la estéticas pasando por una estéticas de las obras a una estética de las actitudes, de los efectos y la experiencia la estética se va obsesionando de los signos todo el análisis de Walter Benjamin describió un cambio radical en su obra de arte en la época de la reproductibilidad mecanizada refundamenta entre la obra aùrica dotada de un aura única y mágica del arte del pasado y la obra fundamentalmente reproducible de nuestra época

El valor del culto y del valor de la exposición que opone unicidad y reiteración indefinida sacrificio y automatismo y luego aparece la estética de la distracción que debemos entenderla en el doble sentido de tiempo libre y de inatención anuncia la experiencia des-estetizada si la palabra sigue refiriéndose a la contemplación de la obra, esta experiencia es análoga a la visual y corporal.

No hay esencia inmutable de la obra de arte sino una esencia histórica que depende de las transformaciones sociales y de los descubrimientos técnicos.




Las transformaciones sociales que lo acompañan son el advenimiento del público en masa, las nuevas condiciones de trabajo y de percepción del mundo, el aumento de los valores de la distracción y de la exposición y la transformación política, en resumen con los sistemas de reproducción mecánica la obra de arte perdió su unicidad, esto destruye el aura: la existencia singular y frágil , la contingencia de la obra en el lugar en donde se encuentra una experiencia simultanea de lo cercano y lo lejano de la obra, de autenticidad en una “localización” única.

Para Greenberg las obras son artefactos con funcionamientos simbólicos que existen cuando hay intérpretes que los hacen funcionar por lo tanto, para ser reconocidos y existir, deben ser activados como símbolos. La activación de una obra de arte consiste en todos estos procedimientos por medio de los cuales existen: ejecución, difusión, exposición, edición, restauración, grabación y traducción: “lo que las obras son, depende en última instancia de lo que son”.

Si la experiencia estética anticipa las obras incluso en su dimensión conceptual ya absorbida y trivializada por el hecho rutinario de los ready made, a esta experiencia le debemos primero interesarnos, por medio de un análisis estético. Estas cualidades específicas que cualifican e identifican la experiencia del arte o por medio de un estudio experimental de los estados estéticos.

La gente se interesa en aspectos muy diferentes: unos valoran la motivación del artista, mientras que otros se interesan en la huellas de la historia o en el éxito técnico. Por otra parte, independientemente de cual sea el centro de interés, la experiencia viene siempre descrita como una experiencia “que fluye”.