Ensayo 4
Estética: el arte y su experiencia
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La historia de la estética filosófica muestra que sus problemáticas , sus formulaciones y sus doctrinas , están en cada caso, relacionados con un estado del arte y un tipo de objeto artístico que a su vez es posible por el conocimiento que se formula sobre el y que hace posible este conocimiento
La dialéctica de la presuposición de Hegel presupone un objeto y lo pone y al mismo tiempo se pone por si misma y así se justifica.
La naturaleza de la obra de arte (de la que trata la ontología del arte ) de su funcionamiento explicado por los mecanismos de la simbolización de la naturaleza del sentimiento estético dado por la experiencia y la actitud estética
De los mecanismos de la creación y del sistema de las artes estructurada alrededor de un museo regulado por la existencia de un canon estético las grandes obras y de un sistema de las bellas artes que gobierna la delimitación del arte en relación unas con otras
Surgió entonces el diagnostico del advenimiento de una nueva forma de experiencia y una tentativa de reformulación de la estética clásica para poder tomar en cuenta el arte moderno.
Otra perspectiva consiste en volver a los conceptos de la estéticas pasando por una estéticas de las obras a una estética de las actitudes, de los efectos y la experiencia la estética se va obsesionando de los signos todo el análisis de Walter Benjamin describió un cambio radical en su obra de arte en la época de la reproductibilidad mecanizada refundamenta entre la obra aùrica dotada de un aura única y mágica del arte del pasado y la obra fundamentalmente reproducible de nuestra época
El valor del culto y del valor de la exposición que opone unicidad y reiteración indefinida sacrificio y automatismo y luego aparece la estética de la distracción que debemos entenderla en el doble sentido de tiempo libre y de inatención anuncia la experiencia des-estetizada si la palabra sigue refiriéndose a la contemplación de la obra, esta experiencia es análoga a la visual y corporal.
No hay esencia inmutable de la obra de arte sino una esencia histórica que depende de las transformaciones sociales y de los descubrimientos técnicos.
Las transformaciones sociales que lo acompañan son el advenimiento del público en masa, las nuevas condiciones de trabajo y de percepción del mundo, el aumento de los valores de la distracción y de la exposición y la transformación política, en resumen con los sistemas de reproducción mecánica la obra de arte perdió su unicidad, esto destruye el aura: la existencia singular y frágil , la contingencia de la obra en el lugar en donde se encuentra una experiencia simultanea de lo cercano y lo lejano de la obra, de autenticidad en una “localización” única.
Para Greenberg las obras son artefactos con funcionamientos simbólicos que existen cuando hay intérpretes que los hacen funcionar por lo tanto, para ser reconocidos y existir, deben ser activados como símbolos. La activación de una obra de arte consiste en todos estos procedimientos por medio de los cuales existen: ejecución, difusión, exposición, edición, restauración, grabación y traducción: “lo que las obras son, depende en última instancia de lo que son”.
Si la experiencia estética anticipa las obras incluso en su dimensión conceptual ya absorbida y trivializada por el hecho rutinario de los ready made, a esta experiencia le debemos primero interesarnos, por medio de un análisis estético. Estas cualidades específicas que cualifican e identifican la experiencia del arte o por medio de un estudio experimental de los estados estéticos.
La gente se interesa en aspectos muy diferentes: unos valoran la motivación del artista, mientras que otros se interesan en la huellas de la historia o en el éxito técnico. Por otra parte, independientemente de cual sea el centro de interés, la experiencia viene siempre descrita como una experiencia “que fluye”.
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